Toda empresa sigue unos procesos para elaborar su producto o servicio. Estos procesos tienen un principio y un fin, por ejemplo, la fabricación de galletas comienza con la creación de la materia prima, y finaliza con el cobro una vez entregada.
Si ostentas un cargo de responsabilidad o eres el dueño de la empresa, hay un ejercicio muy recomendable, se trata de encontrar los cuellos de botella dentro de estos procesos. Un cuello de botella puede encontrarse tanto en una empresa de producción como en una de servicios: sabemos que podemos crear 100 galletas a la hora, o atender 20 clientes con nuestros servicios.
¿Cómo buscar un cuello de botella?, el sistema para detectarlos es muy sencillo, simplemente dibujando un diagrama de flujo de los procesos, detectando todos los actores que intervienen de principio a fin, y localizando aquellos puntos en los que nuestro producto o servicio se “encalla”.
En el ejemplo de las galletas, de nada sirve que podamos crear materia prima para 200 galletas a la hora, si no disponemos de hornos suficientes como para hornear esas 200 galletas. Si tenemos la capacidad de crear materia prima para 200 galletas por hora, embalar 250 galletas, y vender 300, si con nuestro horno sólo podemos fabricar 100 galletas por hora, tenemos el cuello de botella en este activo.
Lo curioso de los cuellos de botella, es que una vez detectados y subsanados, estos no desaparecen, sino que pasan a otro punto. En el ejemplo de las galletas, el siguiente embudo sería la materia prima. Tenemos que pensar que, cada vez que solucionamos uno, estamos haciendo más eficiente nuestro negocio.
Definitivamente, es un ejercicio muy interesante para ganar perspectiva de los procesos de la empresa. Desde VilaTec ofrecemos un servicio de Consultoría IT para ayudar a nuestros clientes a detectar los cuellos de botella provocados por la tecnología.